El balón gástrico está indicado en personas con IMC (Índice de Masa Corporal) superior a 30 kg/m². También se recomienda para aquellos con enfermedades asociadas, como hipertensión arterial, diabetes mellitus y nfermedades cardiovasculares  . Durante los primeros 6 meses de uso, el balón gástrico puede llevar a una pérdida de alrededor del 13% del peso original. Sirve como puente para cirugía de manga gástrica o bypass gástrico en pacientes con obesidad tipo III. En promedio, los pacientes pueden perder entre 13 y 25 kilos con esta técnica. La colocación del balón gástrico es rápida y se realiza bajo sedación. No es necesario permanecer hospitalizado.
Después de la colocación, es fundamental seguir una dieta orientada por un nutricionista y mantener un programa regular de ejercicio para optimizar los resultados.
El balón se retira generalmente de 6 a 12 meses después de haber sido colocado, mediante una endoscopia similar al procedimiento de colocación. El material del balón se degrada con los ácidos estomacales, por lo que su remoción es necesaria. Si se adopta un estilo de vida saludable, no siempre es necesario colocar otro balón después de la remoción. En resumen, el balón gástrico es una opción eficaz para la pérdida de peso en personas con sobrepeso u obesidad tipo I.